Igualdad y medios de comunicación

Los medios de comunicación son potentes agentes de socialización que vehiculan y vertebran la percepción de las personas, sus opiniones y la propia configuración de la realidad. Aquello que no sale en un medio, pareciera que no existe.. Detrás de los mensajes difícilmente puede haber neutralidad. Y mucho menos en las imágenes. ¿Reflejan por tanto los medios la realidad, o “construyen” realidades?
El porcentaje mujeres entrevistadas en la prensa escrita es relativamente escaso, y a menudo siempre en relación a alguien, en una posición subordinada, anónima, sin profesión ni nombre o representada como víctima. La implicación de los medios de comunicación en la lucha por la igualdad de oportunidades de género es imprescindible. Hay que cuidar del lenguaje para no hacer un uso sexista de él, especialmente si tenemos en cuenta que estamos hablando de la mitad de la población. También hay que realizar un esfuerzo activo y consciente para no reproducir roles y estereotipos de género. La implementación de la perspectiva de género en los medios de comunicación supone otorgar a los mismos una mayor calidad informativa y coherencia respecto a la representación de la realidad de hombres y mujeres. Es más, esta inclusión equivaldría a reconocer la gran base femenina de esta profesión. La presencia femenina en las Facultades de Ciencias de la Información duplica a la masculina. Con una preparación equivalente a la de sus compañeros varones, las mujeres acceden con relativa facilidad a las redacciones, aunque comienzan a escasear en los tramos intermedios y ya se pueden contar con los dedos las mujeres que llegan a las escalas superiores. Este techo, unido a una flexibilidad horaria obligatoria y a una precariedad laboral, conforman una amalgama difícil de deshacer.
La Ley para la Igualdad efectiva entre mujeres y hombres articula nuevas responsabilidades de los medios de comunicación, tanto de aquellos de titularidad pública como privada. Esta Ley establece que los medios públicos velarán por la correcta transmisión de una imagen igualitaria, plural y no estereotipada de mujeres y hombres, y que promoverán el conocimiento y difusión del principio de igualdad de oportunidades entre géneros. Respecto a los medios de comunicación privados, y partiendo de la premisa del respeto a la igualdad, la Ley propone fórmulas de autorregulación y responsabilidad referida a contenidos, imágenes y publicidad.
La Ley para la Igualdad efectiva entre mujeres y hombres está en vigor desde hace más de un año y medio, llenando las lagunas que desgraciadamente la ética profesional de algunos medios y profesionales no han sido capaces de cubrir. Una ética que prefiere mantener estas discriminaciones, con publicidad sexista, personajes estereotipados de hombres y mujeres en los seriales televisivos, anuncios de mujeres prostituidas en los clasificados, etc.
En resumen, y como conclusión, las y los Socialistas pensamos que los medios de comunicación deben regirse desde la responsabilidad y el compromiso con la igualdad de oportunidades, cumpliendo escrupulosamente con la Ley, estableciendo buenas prácticas y construyendo un discurso positivo, plural, diverso y ausente de estereotipos, reflejando el modelo de sociedad que deseamos proyectar.